La clave para guardar y proteger tus cojines de exterior en invierno se resume en tres pasos: limpiar a fondo, secar por completo y almacenar en un lugar protegido de la humedad. Te explicamos cómo hacerlo como un profesional.
Los enemigos de tus cojines en invierno: por qué no puedes dejarlos fuera
Aunque tengas la mejor tela del mercado, dejar los cojines a la intemperie en invierno es sentenciarlos a una muerte lenta y dolorosa. Sus principales enemigos son la humedad, el moho, las plagas y la suciedad acumulada. El frío y la lluvia constantes se cuelan en las fibras y en la espuma, pudriéndolos desde dentro.
No te confíes. Un simple techado no es suficiente. La humedad ambiental se condensa y hará estragos. Protegerlos bien es la única garantía para que te duren años.
Guía paso a paso para un almacenamiento a prueba de desastres
Sigue estos pasos al pie de la letra y tus cojines saldrán de su hibernación como nuevos, listos para la primera barbacoa de primavera. No te saltes ni uno.
Paso 1: Una limpieza a fondo es innegociable
Guardar un cojín sucio es como meter comida en un tupper sin tapar. Las manchas de crema solar, bebidas o polvo son un festín para el moho y las bacterias. Antes de nada, necesitan una buena limpieza.
Si las fundas son extraíbles, mételas en la lavadora siguiendo las instrucciones de la etiqueta. Si no, tendrás que limpiarlos a mano. Para un resultado perfecto, sigue nuestra guía sobre cómo limpiar cojines de exterior para dejarlos como nuevos.
Paso 2: Secado completo, la clave definitiva anti-moho
Este es el paso más importante y donde la mayoría falla. Los cojines deben estar 100% secos por dentro y por fuera antes de guardarlos. Un poco de humedad residual es suficiente para que el moho campe a sus anchas durante meses.
Déjalos secar al aire libre, en un día soleado y con brisa si es posible. Presiona la espuma para comprobar que no queda nada de agua. Ten paciencia, puede tardar uno o dos días en secarse por completo. Las prisas aquí son tu peor enemigo.
Paso 3: Elige el lugar de almacenaje ideal (y los que debes evitar)
El sitio donde hibernen tus cojines es crucial. Busca un lugar que sea seco, oscuro y con una temperatura estable. Las mejores opciones son:
- Un trastero o un garaje bien ventilado.
- El interior de un armario en casa.
- Un altillo o desván, siempre que no tenga goteras.
Por el contrario, evita a toda costa sótanos húmedos, cobertizos de jardín con mala aislación o dejarlos simplemente apilados en el porche.
Paso 4: Cómo guardarlos para que respiren (bolsas, cajas o arcones)
No los metas de cualquier manera. El objetivo es protegerlos del polvo y las plagas, pero permitiendo que el tejido respire. Las mejores opciones son las bolsas de almacenaje de tela o las cajas de plástico grandes con algo de ventilación.
Apílalos sin aplastarlos para que no se deformen. Esto es especialmente importante si quieres que mantengan su forma y confort. Un buen almacenaje demuestra lo mucho que valoras la inversión que hiciste en una buena loneta hidrofugada desde el principio.
Consejo del experto: Evita a toda costa las bolsas de plástico fino o de vacío. Aunque parezca una buena idea, no dejan que el tejido respire y pueden atrapar humedad residual, creando el caldo de cultivo perfecto para el moho. Es mejor optar por bolsas de tela transpirable o cajas de plástico con algo de ventilación.
Errores típicos que arruinarán tus cojines durante el invierno
Para que no la líes, aquí tienes un resumen de lo que nunca debes hacer:
- Guardarlos húmedos o sucios: Garantía de moho y malos olores.
- Usar bolsas de basura: No transpiran y crearán condensación.
- Dejarlos en el suelo: Son un imán para la humedad y los bichos.
- Apilar cosas pesadas encima: Deformarás la espuma para siempre.
Preguntas frecuentes
¿Puedo usar bolas de naftalina para evitar las plagas?
Mejor evítalas. Dejan un olor muy persistente y químico que luego es muy difícil de quitar. Es mejor usar alternativas naturales como bolsitas de lavanda o madera de cedro, que son repelentes y huelen de maravilla.
¿Qué hago si no tengo espacio en casa para guardarlos?
Considera un arcón de exterior de calidad. Asegúrate de que sea completamente estanco y tenga buena ventilación para evitar la condensación. Es una inversión que protege a otra inversión.
¿Este proceso sirve también para los pufs y colchonetas de exterior?
Sí, exactamente el mismo. El principio es idéntico: limpieza total, secado absoluto y almacenamiento en un lugar seco y protegido. El tamaño no importa, los enemigos son los mismos.
Un pequeño esfuerzo ahora, cojines perfectos durante años
Guardar bien tus cojines de exterior no es una tarea, es una inversión. Un par de horas de trabajo en otoño te aseguran años de confort y evitan que tengas que gastar dinero en reemplazarlos antes de tiempo. Cuídalos y ellos cuidarán de tus momentos de relax.
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